El neurólogo David Perlmutter sostiene qué ser Agradecido con Dios es bueno para el cerebro porque lo fortalece y además reduce el estrés. Está gratitud además de agradar a Dios trae aparejado beneficios para la salud de nuestro cuerpo que serán manifestados con cambios reales.
Durante una entrevista realizada por CBN News, el neurólogo habla de la gratitud el modo de acción, no solo la expresión gratitud como un pensamiento sino puesta por obra cotidianamente.
El doctor Perlmutter explica cómo funcionan los cambios químicos en el cuerpo y en el cerebro cuándo realizamos acciones qué se basan en la gratitud dando como resultados beneficios buenos, aunque sabemos que también es un deber Noble hacerlo.
El argumento continúa demostrando qué De esta manera se reducen varios químicos del estrés Qué son perjudiciales para el cuerpo como el cortisol mientras se impulsa el crecimiento de algunas áreas del cerebro qué desarrollar la percepción del mundo cómo un buen lugar.
El neurólogo sostiene qué cuando dejamos de ver el mundo de manera positiva el cerebro comienza a verlo de manera negativa. En consecuencia, al practicar la oración, la gratitud y el amor como acciones cotidianas, está nos acogen y dan como resultado una positividad muy autosuficiente, es bueno para nuestro cerebro y para nuestra salud.
Además, practicar la gratitud podemos generar consecuencias positivas en las relaciones. La manera en que vemos el mundo cambia notablemente y todo parece menos intimidante. Si nos volvemos más predispuestos a construir estás relaciones con otras personas podremos sentir que ellos están siendo bendecidos, explica el neurólogo.
Fuente Guíame