Micah Anderson, a sus 13 años se destacaba en el circuito de motocross de EE.UU. hasta que un día salió completamente herido en un accidente. Sus heridas fueron tan graves que lo transportaron a la UCI mas cercana en un helicóptero.
El Dr. J. Dodd, el doctor de la familia Anderson, se imagino que el niño no sobreviviría a las lesiones graves que había sufrido. Pese a que su diagnóstico no era nada favorable, Katja la madre de Micah clamaba a Dios en oración diciendo lo siguiente: “Que por favor dejara que su hijo se pudiera recuperar y ser el chico de antes”.
Pasaron los dias y el joven seguía en coma, pero sus familiares empezaron a interceder pidiendo por su vida, a pesar que su cuerpo no reaccionaba.
Katja ya estaba resignada a dejarlo ir, en vista de que no mostraba ningún signo de mejoría. Sus padres estaban dispuesto a que fuera la voluntad del Señor.
Micah fue enviado a su casa junto con su familia, luego de 3 meses y medio del terrible accidente a vivir con su nueva realidad. Sin embargo el adolescente sorprendió a sus padres.
Su padre Shawn expreso que “Se habia golpeado el dedo del pie mientras rondaba la cama de Micah y el se empezó a reír de mí. No se podía mover pero se reía, asi que empecé a contarle chistes y el no paraba de reírse”. En ese momento el adolescente comenzó a responder a ciertos estímulos.
Al pasar varios meses Micah le dijo a sus padres que después del accidente se había encontrado con Cristo en el cielo. “Mira hacia atrás y vi la cara Jesucristo y un montón de ángeles que lo estaban adorando. En ese instante estaba muy feliz”, manifestó el joven.
Jesús me dijo que me enviaría de nuevo y yo le pregunte porque a lo que el me respondió: “Ellos tienen que saber sobre el amor del Padre, sin importar lo que hayan hecho yo los amo y los perdono”, alego Micah.
Actualmente el joven tiene 21 años de edad y vive compartiendo el mensaje de amor de Jesús con las personas.
El testimonio de Micah sorprendió a Debbie Kirkland. “Estaba muy triste y desconsolada por una pérdida que tuve hace poco, pero al conocer a este chico y su experiencia cambio mi vida totalmente”, sostuvo.
Lastimosamente el amoroso chico quedo con limitaciones físicas, pero no deja de compartir su alegria con los demás. “La vida aqui en la tierra es sumamente corta, por eso que no podemos perder el tiempo estando triste”. Katja, recalco que su hijo la anima todos los días”.
“Esto no es mas que un milagro del Señor. No puedo ni siquiera pensar en lo que Dios le tiene preparado”, informo el Dr. Dodd, que ha sido un fiel testigo del gran avance de Micah Anderson, desde el primer día hasta la actualidad.
Fuente Guíame